EL JUGADOR (CAPITULO V)

Estaba amaneciendo y la luz se colaba débilmente por la ventana. Cuando vio las piezas colocadas tal y como se habían quedado en Estocolmo, no se lo podía creer.


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Una vez que repaso con la mirada toda la habitación y comprobar que allí no había nadie, se sentó en le lado que le correspondía y comenzo a reflexionar sobre la jugada.El tema de esta composición era bastante curioso.  La posición del Diagrama era la siguiente, también había una nota de ella al lado que decía: Juegan Blancas y dan mate en 5 jugadas. Y agregó: ¿Cuál es la pieza del blanco que tiene menos posibilidades de dar mate? Tras una larga meditación, el arrogante Bob reconocía por primera vez, la dificultad para encontrar la solución. Aunque de inmediato apuntilló con una sonrisa en los labios: "el peón blanco ubicado en b2, jamás podría dar mate en ninguna de las posibles soluciones". Justo en el momento que pensaba en todas las posibilidades, Pepper apareció por la puerta. Llevaba un café y una bolsa de papel que supuestamente llevaría unos bollitos o algo por el estilo.
-Vaya Bod !que madrugador¡, no te esperaba tan pronto.

El quería preguntarla mil cosas ¿porque se había marchado?¿porque les perseguían?¿porque estaba tan buenorra y no se la había cepillado todavía?¿porque.........?. En fin, para que preguntar, terminaria la partida y se marcharia a España. El resto no parecía importarle.Pepper se sentó frente a el, llevaba un vestido negro que le hacia parecer una diosa de las películas de blanco y negro, le faltaban los guantes. Con un escote generoso y el huevo ruso de las narices moviendose entre sus pechos la partida se cifro así:

1.b4! Con la amenaza 2.Tf5 seguido por Tf1 mate. Fracasa el inmediato 1.Tf5? debido a 1..,Tc5 y el blanco gana, pero en una cantidad mayor de jugadas. [No servía 1.bxa3? para intentar Tb1 mate, debido a 1...Tc5+ y de nuevo el mate se retrasa.]1...Tc5+ Necesaria para retardar la amenaza del blanco. [Si 1...Txc2 2.Cxc2 a2 3.Td5 a1D 4.Cxa1 Ah4 5.Td1# y mate en 5 jugadas. Justo a tiempo.]

2.bxc5 a2 3.c6! El blanco renueva la amenaza Tf5-f1 o bien Td5-d1 mate.

3...Ac7 4.cxb7 Erróneo es 4.Tf5? Af4! y el mate es en seis jugadas; También falla 4.Td5? debido a Axg3! 5.Td1 Ae1 y nuevamente el mate se produce una jugada más tarde.

4...Axg3 Y ahora a cualquier jugada del negro la respuesta es la misma.

5.bxa8A#! Mirar el diagrama

y el peón de b2 se ha convertido en alfil para rematar con mate en la diagonal tras cinco jugadas de caminar.

Una composición magnífica. Bob realmente impresionado y con cara de malas pulgas por haber perdido, se levanto de su asiento bruscamente, desparramando todo el café sobre el vestido de ella.
- Lo siento, no era mi intención.
- Vaya que faena. Bueno bajare a la habitación de auto-lavandería que tiene este hotel y un momento lo tendré listo. ¿Me acompañas?.

Bajaron hasta el sótano. Era un sitio bastante curioso, tenia cinco cabinas y en cada una había una lavadora y una secadora. Funcionaban con monedas. Entraron en una de ellas. Cada una media dos metros por dos metros, por lo tanto tenían que estar tan juntos que el momento era de lo mas caldeado. Se quito el vestido, quedandose en sujetador y bragas. Eran de color gris perla y negras de encaje, una maravilla para la vista de buen gusto y elegancia. Se agacho para meter el vestido y con su maravilloso culete, le rozo todo el ......"paquete". (Nota del Autor: Siento la vulgaridad, pero es que rimaba un montón). La respuesta de Bod fue rápida. Bruscamente la dio la vuelta y la beso con pasión, a pesar de que ella fumaba, no le olia el aliento a tabaco. Además en esos momentos ni se acordaba de eso. Sus manos recorrían su espalda y su cintura con mucha suavidad. Le desabrocho el sujetador y vio la gloria, aquellos pechos eran como para perderse en ellos. Por eso hundió la cabeza sobre ellos, comiéndoselos enteritos. Ella le desabrocho la camisa y el pantalón que dejo caer al suelo. Cuando le toco el turno a la corbata.....se hizo un lio, asi que se la echo para un lado y se dedico a los calzoncillos. Llevaba unos boxes de esos ajustaditos de color azul marino, pero no podía ver bien lo que se insinuaba debajo. El se los bajo rápidamente y apareció ante ella algo indescriptible. Era sensacional, descomunal,¿ desproporcionado? No, simplemente era maravilloso. El metió la mano entre sus piernas y la llevo a la gloria. Cogiéndola de la cintura la elevo sentándola sobre la secadora.

- Espera un momento, dijo ella.- Saco su vestido de la lavadora y lo metió en ella. Al ponerlo en marcha, aquello comenzó a vibrar con una fuerza y unos movimientos que a Bod le sacaron su cara mas pilla. La cogió de las piernas y se puso a moverse, al principio con fuerza y violencia, pero luego con ternura, mientras ella le rascaba la espalda suavemente con sus uñas. Aquello era una maravilla, ya no podía aguantar mas, así que Bod la volteo y por detrás.... pero no detrás del todo, remato la faena cayendo exhausto sobre su espalda y jadeando desenfrenadamente. Allí hacia un calor sofocante pero sus cuerpos sudorosos no eran capaces de desprenderse de lo bien que estaban. ¡Por fin le había dado el pollazo que tanto deseaba!. Pero no pensó que fuera tan ,increíble y tan bueno.

La secadora había terminado, ella se recompuso y salieron de allí como si nada. Fueron directamente a la calle, tenían un hambre voraz. Se sentaron en una terraza con vistas al puerto. Pidieron unas cervezas y una fuente de patatas con pollo y 6 salsas. Cada vez que se metían una en la boca, se miraban con deseo y sonreían. No hablaron en ningún momento, no hacían falta palabras. Entre ellos dos había algo muy especial. Tenían sus parejas, y se supone que eran felices, pero aquello superaba todo con creces. Era algo que habían deseado toda la vida, esa conexión de cuerpos y de mentes, era un torbellino de felicidad. Y de momento no había mas planteamientos que vivir esos instantes con pasión. Se cogieron las manos y como dos adolescentes pasearon a lo largo de la costa hasta llegar a un mercadillo. El se compro unas bermudas de cuadros y ella se probo un sombrero vaquero que le quedaba realmente gracioso. No sabe porque saco su móvil y la hizo una foto. Quizás quería inmortalizar aquel momento de sentimientos contradictorios.

Llegaron al Hotel de nuevo y casi sin mediar palabras subieron a la habitación. Según abría  la puerta y le sonreía, una mano tiraba de ella hacia dentro y lo siguiente que recordaba Bob, era un porrazo en toda la cabeza.
Cuando se despertó, estaba atado de espaldas a Pepper, el de la cara rajada y dos tipos mas con cara de pocos amigos, les apuntaban con pistolas.
- ¿Donde esta la pasta zorra?. Habla o tu amigote lo va a pasar muy mal.
- No es mi amiguito, cargatelo si quieres me da igual.
Bob se quedo pálido ¿como era posible que la muy......después de lo que habían tenido?. Estaba cagado de miedo para que negarlo. Nunca le habían apuntado con una pistola, claro, que tampoco nunca le habían echado un polvazo como el de ese día. Igual podía morir tranquilo, la única pena, no haberla ganado. Le hubiera gustado una revancha en la tabla y en la cama.
Sintió el frió acero en su sien y el clip típico del cargador de la pistola, cerro los ojos y un sonido ensordecedor sonó en toda la habitación.